Como un regalo
Para este 56º Capítulo general...
Hna. Françoise-Marie Beguin, provincia de Europa.- Me gustaría que cada una de nosotras acogiera a la otra, de otra cultura con su historia, tradición y lengua como un REGALO. Esto será un verdadero desafío, una verdadera ascesis... de este modo crecerá nuestra caridad y también el Espíritu de nuestra Congregación.
Me parece necesario que cada participante quiera intercambiar sinceramente para que podamos construir el cuerpo de la Congregación, un cuerpo de Iglesia, y para que nuestro texto final sea dinámico, al servicio de las provincias y de la Iglesia.
Desafíos para la Congregación ante la realidad que vivimos en la Iglesia y en el mundo
Para mí, uno de los mayores desafíos es nuestro proyecto misionero siguiendo las huellas de Marie Poussepin y de Santo Domingo. Un proyecto que hay que llevar adelante con los elementos de nuestro tiempo, de nuestras culturas.
¿Cómo podemos, donde estemos, vivir y actuar en solidaridad con los más pobres, materialmente, pero también en Europa, con los más vulnerables intelectualmente, psicológicamente, en los márgenes de nuestras sociedades y de la Iglesia?
¿Cómo podemos vivir plenamente en los lugares donde vivimos, con el peso de los años o con el dinamismo de la juventud?
¿Cómo podemos abrirnos al soplo del Espíritu y no al ruido de nuestros teléfonos móviles o de la falsa información?
Otro desafío que debemos considerar son las vocaciones. ¿Cómo nuestra vida común y nuestra vida personal son un reflejo de nuestra vida espiritual, y cómo pueden despertar aún a los jóvenes y ayudarles a responder a la llamada de Cristo a la manera de Marie Poussepin? ¿Qué buscan los jóvenes? ¿A qué retos quieren responder? Algunos jóvenes están implicados en el trabajo de nuestro mundo... ¿cómo les apoyamos? ¿Cuál es la diferencia entre el mundo y nosotros? Los jóvenes buscan una vida espiritual sólida, una educación sólida... y proyectos.