Venezuela, 11/06/2017, Hna. Nícida.- La experiencia que vamos viviendo durante estos días de protestas, donde la represión se va agudizando cada día con más fuerza. Las ganas de luchar por una Venezuela libre y de los venezolanos no se queda atrás; ésta va formando parte de nuestra cotidianidad. Ante esta realidad, contemplo, discierno y me pregunto: ¿Venezuela una cuestión de Justicia y Paz? Porque opositores y oficialistas salen por ti, gritan por ti, se organizan por ti...
Unos salen a marchar movidos por la esperanza de ver a Venezuela solidaria, libre, hermanada, perdonada y reconciliada entre hermanos. Se mueven desde el horizonte de la esperanza y de la fraternidad. Otros salen para ver qué aporte pueden dar en el camino, y están prestos para tender una mano amiga y solidaria en la lucha. Quieren servir arriesgando sus vidas para generar vida, auxiliando, atentos a sus hermanos... Y otros más, van condicionados y viciados por el resentimiento y la frustración. Éstos son los que hacen daño al país. Son los que dicen que aquí no vale el amor al prójimo, de su lengua salen palabras de muerte.
En estas marchas contemplo religiosos, sacerdotes, laicos, mucha gente de nuestra iglesia venezolana... discierno y me pregunto ¿desde qué horizonte salgo a acompañar a mis hermanos? Podemos hacer muchas cosas y buenas pero sino están movidas por la esperanza, la solidaridad, la reconciliación y el perdón será como arar en mar adentro... Hay algo que debemos hacer, actuar amando al hermano aunque lo crea mi enemigo, para no hacerle daño, porque como dicen los musulmanes, cuando matas a un hermano estás matando la humanidad, y la sangre de un hermano grita desde las entrañas de la tierra, su grito llega hasta Dios y resuena en nuestros oídos: ¨He escuchado el dolor de mi pueblo, he visto sus sufrimientos¨. Este clamor de Dios abraza a TODOS los venezolanos.
Desde el horizonte de Dios, que nos hace hijos y nos hermana, no tenemos otra opción. ¡Nuestra opción será por nuestros hermanos! ¡No son palabras bonitas, es una cuestión de Justicia y Paz! Dios los bendiga.
¨He escuchado el dolor de mi pueblo, he visto sus sufrimientos¨
